El momento central del evento fue la visita guiada a la bodega de los heerederos del Marqués de Riscal y el posterior almuerzo en sus instalaciones. En un ambiente distendido, tanto por el lugar del encuentro como por la fecha del mismo, ya en período veraniego, los socios del Propeller Club tuvieron ocasión de contemplar la imaginación arquitectónica del edificio que alberga la bodega, obra de Frank Gehry, autor también del Museo Guggenheim de Bilbao, y de saborear los caldos de la bodega Marqués de Riscal, en la localidad alavesa de Elciego.
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